Chalecos de electroestimulación ¿en qué consisten?

Chaleco de electroestimulación
La electroestimulación es una técnica utilizada en determinados entrenamientos para ejercitar los músculos a través de pequeñas corrientes eléctricas que se aplican a la zona alrededor de los músculos mediante electrodos colocados sobre la piel. Esta técnica es conocida y utilizada desde hace mucho tiempo, pero principalmente era aplicada en tratamientos de fisioterapia y a deportistas de alto nivel. Actualmente se ha hecho muy popular gracias principalmente a los chalecos de electroestimulación. Esta prenda ha llegado al público general y está haciendo furor en gimnasios y centros de fitness. Pero hay que tener en cuenta que no existen milagros y que la electroestimulación ha de ser usada como un complemento al ejercicio físico. Lo que sí parece estar comprobado es que con la ayuda de estos chalecos el ejercicio que se realiza en un tiempo reducido tiene un efecto igual al que se hace sin el chaleco en mucho más tiempo.

Entrenamiento con chalecos de electroestimulación

Como todo ejercicio que se realice, es conveniente hacerlo bajo la supervisión de profesionales que se encargarán de controlar el esfuerzo que se vaya haciendo, así como de aconsejar aquellos niveles hasta donde es recomendable llegar según las condiciones físicas de cada uno. Es muy conveniente antes de iniciar un entrenamiento realizar un chequeo completo para conocer el estado de salud y qué elementos es conveniente trabajar. Estos chequeos incluyen la comprobación de cuánto hay de músculo y de grasa en nuestro cuerpo, así se establece un objetivo claro a conseguir.Para favorecer la corriente eléctrica el chaleco se puede utilizar mojado. Se coloca pegado al cuerpo y va sujeto con diferentes correas, de esta manera se asegura que los impulsos eléctricos lleguen a las zonas deseadas. Una vez colocado, se activa la corriente eléctrica y se va subiendo la intensidad. Hay que tener en cuenta que se tienen que notar los impulsos, pero no deben molestar. Suele ser bastante habitual que la sensación de cosquilleo que se produce al inicio vaya reduciéndose a medida que se realiza el ejercicio, por lo que puede resultar conveniente subirlo posteriormente un poco más. Pérdida de celulitis, endurecimiento de los músculos del abdomen, glúteos, muslos y reducción de peso en general son objetivos fácilmente conseguibles con este entrenamiento.

Tipos de ejercicios e intensidad de la electroestimulación

En contra de lo que muchos pueden o quieren pensar inicialmente, el chaleco no es quien realiza el ejercicio. No basta con ponérselo y sentarse en el sofá. La rutina de entrenamiento que se lleva a cabo es la misma que se haría sin él, la diferencia está en el efecto que esta produce en nuestro cuerpo. Las sesiones de entrenamiento pueden variar según la forma física de cada uno y de los objetivos marcados, pero habitualmente se recomienda entre 20 y 30 minutos de ejercicio. Calentamiento de cardio, ejercicios de fuerza, prácticas con pelota de Pilates, balón medicinal, steps, sentadillas, flexiones y abdominales, son partes habituales de las sesiones con chalecos eletroestimuladores, aunque la lista es abierta y cada entrenador o cada uno individualmente puede elegir aquellos ejercicios que considere más convenientes. Según el ejercicio y el momento del entrenamiento, el tipo de corriente y la intensidad que se aplica se va variando y adaptando.Al principio es bastante habitual la aparición de agujetas, muchas de las fibras musculares trabajadas no han sido nunca ejercitadas con los ejercicios normales, por lo que hay que vigilar la intensidad, sobre todo en las sesiones iniciales. Aunque el chaleco de electroestimulación no posee grandes contraindicaciones, no todo el mundo puede utilizarlo. Es muy conveniente recabar el asesoramiento de profesionales para hacer una práctica deportiva segura. No está recomendado su uso por mujeres embarazadas, personas con problemas graves de salud, como ataques epilépticos o problemas de corazón. El chequeo previo es fundamental.Chaleco de electroestimulación